05 abril 2009

En contra de los ternos

Según San Juanka.

Muchos dicen que el uso del terno en la vida de todo joven marca un hito, ya que a partir de ese momento se dejan de lado las chiquilladas y palomilladas para dar inicio a una nueva etapa: la adultez, en donde las responsabilidades llegan en grado superlativo y las amistades empiezan a casarse y cazarse.

Sin embargo, lo único que logra la “elegancia obligada” en mí es amargarme la vida, fastidiarme y arruinarme el día, la tarde y hasta la noche (depende a la hora en que me lo puse).

Ante todo, siempre desde muy niño gozaba con politos de algodón, shorts o bucitos que me permitían revolcarme en el pasto a mis largas y anchas. Ahora las desafortunadas oportunidades en la que descuelgo el terno (azul por lo general), me resigno a encajonarme y hasta enfrascarme bajo un mismo formato de movimientos monótonos, aburridos y previsibles que me incomodan de sobremanera, llegando, incluso, a sentirme con el complejo de Robocop.

Además, al disfrazarme de alguien que no soy, cuyo atuendo es idéntico al de los demás salvo por el color del adorno, pierdo mi estilo propio, mi forma de ser, mi peculiar manera de vestir y andar, lo cual es algo insoportable.

¡Qué hecho más desagradable! ¡Como lo detesto!

Y al referirme a estilo propio, muchos de mis amigos se habrán dado cuenta de movimientos y acciones eventuales que realizo de manera intempestiva, todo ello gracias a la comodidad con que cuento. Queda evidenciada la diatriba que hago del terno.

Sin embargo, ahí no acaba todo. Otro engorroso asunto es el de cualquier ceremonia. Y ya debe imaginarse a lo que me refiero: bautizos, matrimonios, quinceañeros, conferencias, entre otras tantas actividades que por guardar las apariencias y no ser el tema de conversación de los demás, uno lleva un sauna incorporado, convirtiendo a cada persona en repulsiva por el brillo de la cara y la gota de sudor que lentamente resbala por uno de los costados de la faz hasta que se convierte en algo tan desagradable que el dueño de esa segregación pasa su mano no menos limpia por su rostro, formándolo en una verdadera mazamorra.

¡Qué rico debe ser ese dulce!

Finalmente, deben haber muchos quienes digan la buena apariencia que obtienen frente al espejo y eso ocurre por 2 motivos: el primero es que normalmente se visten tan mal que ni ellos mismos pueden disimular su apariencia y el segundo es el que físico no les ayuda en nada que recién al disfrazarse “pasan piola”.

Además, ¿quién de las personas en la calle vestidas con terno lo hicieron porque les nacía el hecho de hacerlo?

Incluso, para verse bien, es suficiente una camisa sin necesidad del tan detestable terno.

3 comentarios:

Ángel Discos. dijo...

Varias cosas. Me agrada la idea de hacer un a favor y en contra como el que había en Etiqueta negra y en Letgrafía. Sin embargo, los que leí antes en la revista, es decir el impreso, eran de otra calidad. El señor López naturalmente escribe mejor los en contra, por que enumera las cosas y no nos da un detalle de su vida y mezcla palabras como ‘piola’, que me parece rebaja el nivel del artículo.
En los a favor tengo también algunas cosas que decir pero son básicamente de perspectiva, puntos de vista que son discutibles.

Pero vayamos por los errores en este post.


1. En el primer renglón dice hito y después es necesaria una pausa, ¿puede ser una coma?. Gracias.

2. Después de un Sin embargo siempre va coma. Por favor.

3. En ese mismo párrafo hay un error de concordancia dice: (depende a la hora en que me lo puse) y debe decir: depende de la hora en que me lo haya puesto o en su defecto en que me lo ponga )

4. El personaje se llama Robocop y no Robocot.

5. Dios mío, concordancia nuevamente. En el sexto párrafo dice: Queda evidenciado la diatriba que hago del terno. Diatriba es femenino y evidenciado también debe ser femenino. Es decir: Queda evidenciada la diatriba que hago del terno.

6. Séptimo párrafo sexto renglón. ¿Está usted con hambre señor San Juank?. Debe decir por su rostro y no por rostro.

7. Ese “¡Que rico debe ser ese dulce!” No debería llevar tilde por ser una expresión de admiración.

8. ¿En el penúltimo párrafo quiso usted hacer un trabalenguas con la palabra hecho?.

Espero no aparezcan más errores en sus próximos post.

Juan Carlos Antón Llanos dijo...

Para Ángel Discos:
Ante todo gracias por leer el blog y dejar comentarios y críticas, lo cual es algo que agradezco mucho.

Con lo referente a los errores cometidos, ya fueron rectificados lo más pronto posible.

Al referirte a Frank López y sus "en contra" es una posición muy respetable, pero que preferí no seguirle porque particularmente no comparto esa idea (además, él también escribirá el tema referido en algún momento).

Finalmente, el hecho de mezclar palabras, lo hacen hasta Beto Ortiz o Jaime Bayli en sus columnas periodísticas, lo importante es no abusar de éstas.

Saludos.

Anónimo dijo...

bueno yo soy todo en contra de la ortografía me llega escribir bien jajaj soy ateo y librepensador y opino igual que ud. El terno es algo que me incomoda siempre con la etica profesional siempre imaginamos un gran empresario con saco y corbata pero por que no una persona comun con su propio estilo vivimos en un mundo que ya esta acostumbrado a usar terno ya sea por el trabajo. creo que deberías cambiar eso si formaría mi propia empresa deseria que todos vengas como les de la gana por que la inteligencia o capacidades no lo hace un terno lo hace el hombre.