Pasaporte negro

Según San Juanka

Por más obvio que suene el título, hay una razón muy interesante y anecdótica para el nombre. Y aunque sé que muchos no compartirán mi opinión, a todos les habrá pasado alguna situación similar a la que voy a contarles.

En una soleada tarde de un día cualquiera salí con la flaca (enamorada para los que no entienden) a dar una vuelta por las playas miraflorinas, en donde se tiene una vista muy agradable, tanto del paisaje como de las vecinas del lugar.

Incluso, resulta un tanto difícil mirar al vacío cuando esbeltas figuras pasan constantemente al lado de uno y lo único que se hace es mirarlas cándidamente; sin que esto me convierta en un ruin infiel porque, como dice el título, los ojos son para ver.

Seguramente a estas alturas, más de una fémina pensará que soy de lo peor; sin embargo, no es cierto debido a que estoy en un 99% seguro que todo hombre bien hombre se le “desvío” la mirada pese a estar acompañado con alguien del sexo opuesto.

Es mas, esto también ocurre en el sentido opuesto; es decir, las mujeres en alguna ocasión desvían la atención para ver al “cuerpo perfecto”. En caso queden dudas al respecto, puede hacer una mini encuesta y se dará cuenta que es cierto lo que les digo.

¿Sabe cuál es la diferencia entre un hombre y una mujer en estas circunstancias?
Las damas son más discretas y al mirar lo hacen con disimulo, pero si éstas descubren a su acompañante mirar a otra que no sea ella, se enfadan como si nunca lo hubieran hecho antes.